martes, 6 de marzo de 2012

LA EDAD DE LA AMISTAD


Creo que la amistad tiene edad.
No es como el amor que puede sentirse alocado nuevamente cuando renace a los 80, como el odio que es siempre negro y mezquino o la envidia que echa raíces en el alma casi desde que nacemos. La amistad tiene etapas, a semejanza de nosotros mismos, y se hace humana en la forma de crecer y cumplir años.
Cuando nace, acompaña al ser humano con inocencia de niña. Nos permite tener esos amigos del cole con la cadencia inexperta del que apenas sabe hablar. Y por eso nos provoca sentimientos encontrados, confundidos entre el ego que esos días es compañero de pupitre y las ganas de sentirse compinchado en la aventura fantasiosa de los juegos.
Así pasa sus primeros cumpleaños, con palmadas de mil manos diferentes y emociones que cambian con el curso académico de la vida, el descanso del verano o la alegría de la afición compartida.
Y de esa manera la encuentra la adolescencia. Y ahí, ahí es donde ella puede al fin lucir sus galas porque todo huele a hormona estrenada y a sentimientos exagerados aflorando por los poros de una piel recién cambiada. Es el momento del “esto nunca acabará”, “te quiero un montonazo” y otras frases hechas más, copiadas de una tarjeta postal o convertidas en numero uno en la red que actualmente nos enreda la vida.
Luego, después de esa explosión carnavalera de la fiesta y la alegría, tengo la sensación de que la amistad se hace la sueca. Anda por ahí, de fiesta en fiesta, admitiendo sin dudar las buenas nuevas, pero sabiendo, como saben los sabios y los viejos que nada será para siempre y que habrá tiempo, alguna vez, de rescatar lo que quede en la resaca azul de la tormenta vencida.
Pero hay un día, un día de tantos en los que nos levantamos de la cama sintiéndonos renovados, en el que tenemos la sensación de que algo ha sucedido en el tiempo en que soñamos. Y es que aquel sentimiento que desde siempre nos escolta, alcanza la madurez en el soplo repetido de las velas. Es entonces, en ese momento dulce en que quedaron atrás los desafíos del oleaje, cuando se nos presenta serena, con el encanto del trabajo rendido. Y como siempre queda algo en la piel del tatuaje borrado, volvemos a los orígenes y a los recuerdos con sensatez y agradecimiento, un poco sorprendidos de que esta señora de pelo cano, vuelva a traernos desde el corazón el pellizco aquel que un día nos enseñó a confiar en el amigo, a ser confidentes fieles y compañeros de viaje.
Me encanta estar en esta etapa aunque sepa de antemano que la amistad creció conmigo y que he cumplido los años de ver el sueño consumado. Me alegra el alma saber que ya no es tiempo de fingir que nos queremos, que estoy en ese momento de mirar con la sinceridad que se aprende con los años y aceptar lo bueno y lo malo, lo igual y lo diferente de cada uno de mis amigos.
Por todos aquellos a los que ahora recibo desde la calidez de mi sofá, por todos los que quedaron en el vaivén del camino cuando la amistad se despistaba, por vosotros, por los que sabéis que estáis a pesar de no compartir conmigo todas y cada una de mis definiciones, siempre por vosotros. Gracias.

19 comentarios:

Chary Serrano dijo...

Escribes con gusto,leerte es un placer.

Te agradezco tu comentario en mi artículo del blog de Hitsbook

Lola velasco dijo...

Y elegante. Preciosa descripción, muy clara y cierta para mi, desde el principio hasta el final
Un abrazo

Mamen O. dijo...

Gracias a las dos por esas palabras tan amables. Vosotras pertenecéis a un tipo de amistad que se ha creado en esta locura de los blogs y que es algo muy especial por lo diferente. Seguramente no nos reconoceríamos al vernos por la calle pero tenemos un contacto agradable, educado, que echaría muchísimo de menos si no pudiera conectar con internet. Es curiosa la vida. Besos.

Encarni dijo...

¡Qué texto tan emotivo y tan bonito! Es cierto Mamen, las amistades van con las distintas etapas de nuestra vida. Me costó aceptar que algunas amistades se enfrían y se van a pesar de haber intentado por mi parte que no fuese así, otras veces no lo intenté porque sabía que era lo mejor. Aún así, en esa etapa de euforia que volví a vivir en mi segunda adolescencia como yo la llamo, se quedaron por el camino de forma brusca personas que jamás pude imaginar y que a pesar de todo, a veces echo de menos. Ahora ya he aprendido que nada es para siempre y que nadie es imprescindible y como tú bien dices Mamen, quiero a mis amigos como son, con sus más y con sus menos. No presumo de tener muchos amigos pero sí de tener muy buenos amigos, entre los cuales te incluyo a ti y todas esas personas que conocí gracias a ti , aunque el contacto que mantenemos ahora es ciberespacial, mi cariño por ti y por ellos es el mismo. Gracias a ti Mamen, y un beso a esas personas de las que hablo que sé que algunas te leen.

Mamen O. dijo...

Encarni, gracias como siempre por el cariño que sabes que es recíproco.
Yo creo totalmente en lo que cuento en el texto. Ahora mismo me encuentro en el mejor momento que he vivido nunca con respecto a la amistad porque supongo que mi concepto de ella ha madurado como yo. He aprendido a aceptar que cada uno es como es, que perfecto no hay nadie y menos que nadie yo y que se puede ser amigo de alguien sin tener en cuenta su confesión religiosa, sus ideas políticas, su condición sexual,el tiempo que tiene para dedicarme o no una tarde...y eso me da una libertad que antes no sentía. He aprendido a distinguir a los amigos de los conocidos aunque curiosamente considero amigos a personas con las que no comparto un contacto diario ni un chorreo de penas telefónicas pero que sé, sin dudarlo que están ahí. Supongo que me estoy haciendo vieja...ja,ja.
Besitos para ti y sobre todo para tu enanilla.

MARTA dijo...

Amistad? Que palabra tan complicada... A lo largo de la vida me he dado cuenta que la palabra amistad tiene un significado muy diferente para cada persona, hay mucho egoísmo... Y solo se piensa en uno mismo... Tampoco me imagine que por Facebook se pudiera realmente tener amistades a las que se quisiera mas que a una persona conocida... Bonita entrada... Y que hace mucho que pensar... Muackkkkk

Nuria Lourdes dijo...

Holaaaaaa, te felicito por tan maravillosa entrada.
En lo personal,adoro tener AMIGOS (AS)y respetar y apreciarlos a todos... porque la AMISTAD, es aceptar a los amigos tal cual son...
Te dejo un abrazote desde mi Perú!.

Mamen O. dijo...

Sí que es complicada la palabra. Besos para las dos y gracias por participar en mi tertulia. Sois un encanto.

JUAN PAN GARCÍA dijo...

Hola, Mamen: sólo paso a agradecerte tu comentario y a pedirte me perdones por mi ausencia en los últimos días.Estoy pasando unos días y noches muy malos con neumonía.Me parece excelente tu entrada, aunque, la verdad, no tengo ánimos para comentar ni para nada.
Un abrazo.

Manolo dijo...

Es cierto que se atraviesan distintas etapas en la vida que influyen bastante en la amistad. En la niñez, en la adolescencia, cuando tienes pareja, cuando te casas, cuando tienes hijos, etc.
Me ha pasado con amigos que tenía en la adolescencia que tuvieron novia y se separaron un poco, se casaron y se separaron más. Los sigo considerando mis amigos porque sé que están ahí, pero es verdad que es una amistad "fría". Ahora tengo nuevos amigos y están más cerca, en todos los sentidos. También hay personas que, aún sin haberse mencionado nunca la palabra amistad entre nosotros, las considero mis amigas (espero que ellas a mí también).

geli dijo...

Buenas noches, amigos. Creo que es cierto que el concepto de amistad que se tiene en cada etapa de tu vida es distinto, porque claro "la locura" y "la pasión" que se tiene a los 18, donde un enfado con una de tus "mejores amigas" puede ser una tragedia, no se tiene a los 40, donde ya sabes de que "pie cojea" cada uno.
Tambien creo que en cada etapa de tu vida tienes distintos tipos de amigos. Yo tengo la suerte de tener algunos incondicionales, amigos de muchos años, con los que puedo pasar meses sin hablar y cuando nos vemos, parece que no ha pasado ningún día y podemos continuar una conversación sobre temas cotidianos, como si no hubiese pasado el tiempo. Tengo otros amigos, que aunque son de hace poco y a los que veo sólo de vez en cuando, me alegra mucho tener. Incluso tengo algunos con los que he pasado pocas experiencias, pero han sido tan gratificantes y tan intensas, que estoy deseando quedar con ellos siempre que sea posible. En fin, sean del tipo que sean, no sería una persona feliz, sin mis amigos.

Mamen O. dijo...

Juan: ya te echaba yo de menos. He visto que no publicas y que no acudías al café pero no he querido comentarte nada para no parecer una cotilla o presionarte a hacer comentarios. Espero que estés mejor, si ya es fastidioso un catarro, no quiero ni pensar una neumonía. Un abrazo.
En cuanto a Manolo y a Geli, creo por lo que veo que los dos pensáis como yo que la amistad tiene edad y que evoluciona como evolucionamos nosotros mismos. A mí, por mi parte, me gusta mucho más el lugar en el que estoy ahora a pesar de que ello signifique ser un poquito más vieja, je,je. Un beso

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo, a estas alturas ya sabes distinguir perfectamente con quien puedes contar y con quien no, cosa que de joven no sabes. Que te mejores Juaaaaaaan!!!!!!!!

Mamen O. dijo...

Últimamente te echábamos de menos primu. Ten cuidado que he oído por ahí que quieren quitarte el puesto de comentarista número 1. Je, je ¿quién será?

Anónimo dijo...

Me encanto Esta descripción en la que enmarcaste ,la amistad .A sido un fiel reflejo de la realidad que muchas veces aumentamos o disminuimos. Tu la retratas tal como es

Mamen O. dijo...

Hola Miguel Angel. Bienvenido a la tertulia. Gracias por tus palabras y por dejar tu comentario.
Un saludo

Nati Velázquez dijo...

Hola Mamen, echando un vistazo a tu blog he dado con estas palabras tan bonitas sobre la amistad. Como siempre me ha encantado y como todo lo que escribes me ha hecho reflexionar. Que importante es tener buenos amigos y poder contar con ellos, aunque no los veas todos los días sabes que están ahí, yo me considero privilegiada en ese aspecto, no es la cantidad sino la calidad lo que cuenta.
Hace unos meses recupere a dos amigas de la infancia, ha sido maravilloso después de tantos tiempo parece que los años no han pasado, es como si ese paréntesis no hubiera existido.
En fin Mamen muchas gracias por tus palabras, ya sabes que aunque tu niño ya no este en el cole aquí tienes una amiga para lo que necesites y a ver si nos tomamos un cafetito. Muchos besos para ti y para tu niño.

Mamen Orcero dijo...

Hola Nati.
Yo me quedo extrañada cuando oigo decir a la gente eso de "mis amigos se cuentan con los dedos de la mano", de forma orgullosa, como si fuera estupendo tener pocos amigos, aunque estos sean muy buenos.
Yo creo todo lo contrario. Y en esa creencia influye el haber perdido la exigencia absoluta. Para mí un amigo es una persona con la que me siento bien, con quien tengo la sensación de saber que es una buena persona. Y eso no implica ni conocer todas sus intimidades, ni compartir todas sus opiniones. La amistad es respeto, es amabilidad, es educación, es compañía cuando la necesitas y alejamiento cuando intuyes que no es el momento de estar ahí.
Ten por seguro que cuento contigo en ese grupo de personas con las que no necesito fingir que me siento bien. Te tomo la palabra del café. Un beso y disfruta mucho de lo que te queda de descanso.

Un Colibrí Viajero dijo...

bellisimo hogar de letras un placer pasear por aqui mis humildes felicitaciones, cordial saludo.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
UA-11714047-1